EVANGELIO DÍA 15 DE MARZO



En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: “Al orar, no repital palabras inútilmente, como hacen los paganos, que se imaginan que por su mucha palabrería Dios les hará más caso. No seáis como ellos, porque vuestro Padre sabe lo que necesitáis antes de habérselo pedido. Vosotros debéis orar así: Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea Tu Nombre. Venga Tu Reino. Hágase Tu Voluntad así en la Tierra como se hace en el cielo. Danos hoy el pan que necesitamos. Perdónanos nuestras ofensas como también nosotros personamos a quienes nos han ofendido. Y no nos expongas a la tentación, sino líbranos del maligno. Porque si vosotros no perdonáis a los demás, tampoco vuestro Padre perdonará el mal que vosotros hacéis”.
(Mateo 6, 7-15)

MEDITACIÓN

Los paganos, los que no te conocen, no saben que tienen un Padre que se ocupa de ellos, ésta es la gran diferencia. Es necesario que recemos el Padre Nuestro desde el corazón, para renovar la confianza y la serenidad.

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