EVANGELIO DÍA 7 DE ABRIL




En aquel tiempo dijo Jesús: “Si Yo diera testimonio a favor mío, mi testimonio no valdría; pero hay otro que da testimonio en mi favor y me consta que su testimonio vale como prueba. Vosotros enviasteis a preguntarle a Juan y lo que él respondió es cierto. Pero Yo no dependo del testimonio de ningún hombre, sólo digo esto para que vosotros podáis ser salvos. Juan era como una lámpara que ardía y alumbraba y vosotros quisisteis gozar de su luz un poco de tiempo. Pero tengo a mi favor un testimonio de más valor que el de Juan. Lo que Yo hago, que es lo que el Padre me encargó que hiciera, prueba que de veras el Padre me ha enviado. Estudiáis las Escrituras con toda atención porque esperáis encontrar en ellas la vida eterna y precisamente las Escrituras dan testimonio de Mí. Sin embargo, no queréis venir a Mí para tener esa vida. Yo no acepto honores que vengan de los hombres. Además os conozco y sé que no amáis a Dios”.
(Juan 5, 31-47)

MEDITACIÓN

Jesús, sabes que busco afanosamente pruebas y lecturas que confirmen Tu verdad y me cuesta el ámbito del Espíritu, que trasciende la aprobación humana y tantos detalles cotidianos. Me pesa esta nube de impedimentos para conocerte y descubrir como amarte.

© Todos los derechos reservados. Orden del Temple, 2.011