EVANGELIO DÍA 5 DE NOVIEMBRE



En aquel tiempo dijo Jesús: “Os aconsejo que uséis las riquezas de este mundo malo para ganar amigos, para que cuando esas riquezas se acaben haya quien os reciba en las moradas eternas. El que se porta honradamente en lo poco, también se porta honradamente en lo mucho, y el que es deshonesto en o poco, también es deshonesto en lo mucho. De manera que si con las riquezas de este mundo malo no os portáis honradamente ¿quién os confiará las verdaderas riquezas?. Y si no os portáis honradamente con lo ajeno ¿quién os dará lo que os pertenece. Ningún criado puede servir a dos amos, porque odiará a uno y querrá al otro, o será fiel a uno y despreciará al otro. No se puede servir a Dios y al dinero”. Los fariseos que eran amigos del dinero, al oír estas cosas se burlaban de Jesús. Él les dijo: “Vosotros pasáis por buenos delante de la gente, pero Dios conoce vuestros corazones, y lo que los hombres tienen por más elevado, Dios lo aborrece”.
(Lucas 16, 9-15)

MEDITACIÓN

Tu consejo Señor, toca un deseo profundo: Tener dinero, mucho dinero y también toca el miedo a quedarnos sin él. No me pides que sea ingenuo o que ignore el valor de las cosas, sino que no le dé al dinero el poder de definir mi vida. Lo primero, es confiar en Tu Providencia, y eso, Señor, es un desafío a mi mente. Líbrame de burlarme de los locos que llevan hasta el extremo Tu palabra y son por tanto más felices que yo.

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