EVANGELIO DÍA 7 DE NOVIEMBRE



Jesús dijo a sus discípulos: “Siempre habrá incitaciones al pecado, pero, ¡ay de aquel que haga pecar a los demás!. Mejor sería que le arrojasen al mar con una piedra de molino atada al cuello, que hacer caer en pecado a uno de estos pequeños. ¡Tened cuidado!. Si tu hermano te ofende, repréndele, pero si cambia de actitud, perdónale. Aunque te ofenda siete veces en un día, si viene siete veces a decirte: No volveré a hacerlo, debes perdonarle”. Los apóstoles pidieron al Señor: Danos más fe. El Señor les contestó: “Si tuvierais fe, aunque fuera tan pequeña como una semilla de mostaza, podríais decirle a esa morera: Desarráigate de aquí y plántate en el mar y el árbol obedecería”.
(Lucas 17, 1-6)

MEDITACIÓN

Tus apóstoles te piden más fe, yo te pido más amor, para que todo cuanto toque quede impregnado de él, para que todo aquel que me trate quede lleno de amor, para no provocar a nadie el mal. Con amor, puedo cuidar del más pequeño, situarme ante el más grande y moverme con libertad entre los iguales. Con amor, puedo llegar hasta el final.

© Todos los derechos reservados. Orden del Temple, 2.011