ORACIÓN

Sigue trabajando cuanto puedas en la vida interior, en la oración, en la presencia de Dios durante el día, en vivir con Él en Su Espíritu y verlo también en todos aquellos que nos rodean, familia, amigos, compañeros de trabajo, personas con las que nos cruzamos, aquellos que nos piden ayuda, otros que están enfermos y solos, los abandonados de la sociedad, los discapacitados.... y hasta aquellos que nos ofenden, que devuelven mal por el bien que les hicimos, nuestros enemigos, aquellos que sin saber el por qué, después de que se declaraba tu hermano, tu hermana, te traiciona, te difama, te calumnia, te abandona, olvidando la hospitalidad, la mesa que compartió en tu casa, por esos, aún hemos de pedir más, porque realmente  no saben lo que hacen, pero tú, yo, nosotros.... ¿Te has parado a pensar que cada uno de ellos es tu hermano, tu hermana, y un templo de Dios vivo?.....