EVANGELIO DÍA 24 DE MAYO



Jesús, levantando los ojos al cielo, oró diciendo: "Padre Santo, no sólo por ellos ruego, sino también por los que crean en Mi, por la palabra de ellos, para que rodos sean uno, cómo Tú, Padre, en Mi y Yo en ti, que ellos también lo sean en nosotros, para que el mundo crea que Tú me has enviado. También les di a ellos la gloria que me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno: Yo en ellos y Tú en mi, para que sean completamente uno, de modo que el mundo sepa que Tú me has enviado y los has amado como me has amado a Mi. Padre, ese es mi deseo. que los que me confiaste estén conmigo, donde Yo estoy y contemplen tu gloria, la que me diste, porque me amabas, antes de la fundación del mundo. Padre justo, si el mundo no te ha conocido, Yo te he conocido y éstos han conocido que Tú me enviaste. Les he dado a conocer y les daré a conocer Tu Nombre, para que el amor que me tenías esté en ellos, como también Yo estoy en ellos".
(Juan 17, 20-26)

MEDITACIÓN

Señor, sogues intercediendo por mi ante el Padre, y por todos los que has dejado en este mundo, porque sin tu ayuda no lo conseguiremos. Deseo estar donde Tú estés y contemplar tu gloria, para fortalecer mi debilidad y elevarme a la dignidad de ser hijo de Dios.

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