ORACIÓN

Él se ha dado todo para ti. Y tú ¿estás entregado a Él?. ¿Por qué no?. Piénsalo.... ¿No quieres?. Pues anímate y aprende a despreciar las cosas "exteriores" y ahondar cada día más en las únicas que en realidad tienen valor. Para conseguirlo, vigoriza tu vida de oración cada día un poco más.