VIRGEN SANTÍSIMA

Tenemos ante nosotros el ejemplo de la Virgen para aprender de Ella. Exteriormente, Su vida fue muy sencilla, nada la distinguía aparentemente de las demás mujeres de su pueblo, pero interiormente, ¡que gran diferencia!. Sus pensamientos, deseos, intenciones, todo iba dirigido únicamente par agradar al Señor. Vivía sólo por Él y nada deseaba fuera de Él y Su Voluntad. Su oración era continua, y así, Su fe y amor iban en aumento cada día.