PAZ

Mientras no aceptemos plenamente y como venido de la mano de Dios, todo cuanto de costoso nos venga por medio de la obediencia o las contrariedades que la vida trae consigo, en las circunstancias y acontecimientos que se van sucediendo, no estaremos en paz con el Señor, porque no estaremos haciendo Su Voluntad y reconociéndole como nuestro Dios y Señor.