CONFIANZA Y ABANDONO EN LOS BRAZOS DE DIOS

Tengamos confianza en Quién siempre  nos está perdonando y amando a pesar de nuestras miserias y debilidades, y que precismente cuando las aceptamos humildemente, es cuando Él actúa en nosotros purificándonos y sntificándonos. Nuestro error está en que no acabamos de convencernos de que es únicamente sobre nuestra debilidad, sobre lo que Él contruye nuestra santidad.